¿Recuerdas que estabas haciendo en esta época cuando eras niño/a?
Seguramente estabas ya preparando tu carta a los reyes, es decir, sin saberlo te acercabas el tema del que hoy quiero tratar: la importancia de escribir tus objetivos.

La importancia de escribir tus objetivos

Que bonitos tiempos, aquellos en los que las cartas aún eran de papel, las que casi siempre empezaba con: queridos reyes magos….
Algunos/as con una carta no tenían suficiente, otros/as no paraban de cambiar su lista a medida que pasaban los días y veían nuevos anuncios en televisión… daba igual tu estilo en hacer la carta a los reyes, el caso es que la hacías. ¿Por qué? Porque confiabas en que tus deseos se cumplirían.

Escribir sobre papel y marcar nuestros objetivos

Lo hemos escuchado miles de veces y seguimos sin ver la importancia que tiene, el hecho de escribir en un papel nuestros objetivos y deseos. “Si, si seguramente funciona, pero ahora no tengo papel, ahora no encuentro el boli, tengo que encontrar el momento para pensar” … diez mil excusas surgen en nuestras cabezas para no hacerlo. Además, ¿quizá tampoco es tan importante no? ¡Pues déjame decir que sí! marca la diferencia el hecho de escribir tus objetivos en un papel, por esta razón lo usamos mucho en las sesiones de coaching.

Ejemplo

Hace años mi jefe nos propuso marcar con un rotulador amarillo, los resultados que nos gustaría obtener ese mes siendo muy positivos. Yo marqué 3 veces más de lo que solíamos conseguir (por pedir pedir…). Lo marqué pensando  que no era realista.

Ese mes obtuve lo marcado. Me quedé realmente impresionada.

¿Por qué paso? Fueron varios los motivos; por una parte, yo centré mi atención en ese resultado, lo que hizo que todas mis acciones fueran encaminadas hacía ahí. De otra parte, esa nueva cifra dejó de ser “extraña” para mí, la dejé entrar en mi rango de “normalidad”. Cambié mi creencia, pasé de pensar que era imposible a pensar que era posible.

¡Plasma tus objetivos!

Os invito a coger un papel y boli y anotar vuestros próximos objetivos. ¡Escríbelos, mantenlos la vista, repásalos, cámbialos tantas veces como quieras!

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