Cuando aprendí cómo funciona la rueda de la postergación, me sorprendió y sirvió. Por este motivo, hoy quiero compartirla con vosotros.
Lo interesante para mí, no es tanto saber cómo funciona la rueda, sino entender como salir de ella. ¡Al final de este post encontraréis la respuesta!
¿Cómo se forma la rueda de la postergación?
1. La rueda empieza con una tarea o actividad que quisiera hacer y NO HAGO.
2. Como no lo hago, me siento CULPABLE.
3. Como me siento culpable por no hacerlo, ME CASTIGO.
4. Este castigo, se convierte en un “tengo que”, una OBLIGACIÓN.
5. Perdemos la MOTIVACIÓN intrínseca y el placer de la tarea o actividad a realizar.
6. Ahora sin motivación, requiere un ESFUERZO importante llevarlo a cabo.
7. Se ha convertido en un esfuerzo tan importante que decido POSTERGAR: “ya lo haré otro día”.
Y la rueda vuelve a empezar: no lo hago, me siento culpable, me castigo etc…
¿Cómo salimos de la rueda de la postergación? Con UNA ACCIÓN.
Como dirían nuestras abuelas; todo es ponerse.
Y es que nadie se salva, todos tenemos esas tareas que nos llevan a pensar cosas fuera de contexto: “a ver si hay algo para picar en la nevera”, “hace días que no me corto las uñas”, “¿habrá cartas en el buzón?”… cualquier despiste es bueno para dejarlo para “otro día”.
De esta forma postergamos ir al gimnasio, estudiar, empezar a comer sano, hacer llamadas, ordenar papeles, ir al dentista…en definitiva, una larga lista personalizada para cada uno.
¡Te animo a TOMAR ACCIÓN!
Ponte las zapatillas de deporte, comete una ensalada, haz esa primera llamada, ordena el primer papel, pide cita al dentista, pide tu primera cita al coach: https://bit.ly/2R7NCPb ¡Una primera acción, puede cambiar tu vida entera!
¿En qué tareas entras tú en la rueda de postergación?
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