La inteligencia emocional también es saber como actuar ante una persona enfadada ya que en nuestro día a día no solamente debemos lidiar con las tareas propias de nuestro cargo, sino que también debemos relacionarnos con las demás personas (y esto a veces se complica).
Aunque este post trata sobre cómo lidiar con personas molestas, no olvidemos que nadie debería permitir faltas de respeto, así que cuando sientas que esto sucede, te invito a poner límites. Al final de este post te explico como hacerlo.
Un cubo lleno que necesita vaciar
Sin ninguna intención de sacar responsabilidad a la persona con poca inteligencia emocional y a sus conductas, quiero recordarte que muchas veces las personas somos como cubos de basura. Nos vamos llenando de porquería (rabia) y para vaciarnos elegimos otros cubos que traducidos a la vida real son: la primera persona que encontramos o bien aquella con la que nos atrevemos a descargar.
En el segundo caso hablaríamos de un desplazamiento (cuando grito a mi amigo lo que no tengo valor de gritarle a mi jefe). ¿Es ideal? No lo es en un mundo de inteligencia emocional perfecta, pero somos humanos y no máquinas y en ocasiones, esto sucede. Es importante que recuerdes que muchas veces no va contigo la cosa, eres tu como podría ser otro/a. Entender esto, nos permite tomar distancia emocional y poder tomar cartas en el asunto.
Inteligencia emocional: la técnica de los 3 pasos ante un ataque
Lo/la ves venir, parece que la vena del cuello está un poco más hinchada de lo normal, camina más rápido, está más rojo/a de lo habitual… ¡STOP! Pon en marcha la técnica de los 3pasos.
PASO 1: DEJA PASAR
Sitúate delante de la persona con una corporalidad firme, mirándola directamente a los ojos, con el cuerpo abierto y los pies enraizados en el suelo. Nada de encorvaduras, cruces de piernas o de brazos y muchos menos, nada de sentarse o empequeñecerse.
Vendría a ser como cuando queremos espantar a un oso; cuanto más firme y grande nos vea, menos se atreverá a atacar. Y, al contrario, cuánto más débil nos vea, más atacará.
PASO 2: MIRA EN LA MISMA DIRECCIÓN
Antes de lanzarle tu opinión la persona necesita que mires aquello por lo que está enfadado/a. Préstale tu atención de forma sincera, sin juicio ni interrupciones. Ya tendrás tiempo de defenderte si es necesario, ahora solo escúchale.
PASO 3: RESPONDE CON AMABILIDAD
Es un signo de inteligencia emocional el hecho de usar la empatía en el momento de responder. Más tarde expresaremos nuestra opinión y finalmente cerraremos pidiendo un compromiso (siempre en este orden). Aquí te muestro un ejemplo:
“Comprendo que estés enfadado/a por la situación, sin embargo, no me parece correcto que llegues una hora tarde sin avisar. Te pido que la próxima vez que suceda, me mandes un mensaje”.
¿ME PUEDES EXPLICAR EN MÁS DETALLE EL PROCESO: EMPATÍA, OPINIÓN Y PETICIÓN?
Empatía, la base de la inteligencia emocional
La persona necesita sentirse escuchada “de verdad”. Y eso pasa por prestar atención tanto a sus sentimientos como a sus necesidades. Necesitaremos aplicar una escucha libre de juicios y observar su comunicación verbal y no verbal. ¿qué nos dice con palabras? ¿y más allá de las palabras?
En esta fase de “empatía” utilizaremos frases cómo: “Siento que estés molesta”, “comprendo que estés enfadado”.
Usaremos siempre palabras que el interlocutor está usando. De esta forma evitaremos usar terminologías con distintos significados para el/ella y además conseguiremos que se sienta realmente escuchado/a.
Si las condiciones lo permiten, invitar a la persona a un espacio íntimo y dedicarle unos minutos de calidad, ayudará a que se sienta realmente atendida. Una vez realizado este primer punto, observaremos que la emoción del enfado ya ha bajado un peldaño.
Expreso mi opinión
Una vez hemos escuchado de forma neutra a la persona, debemos darle nuestra opinión (esté alineada o no con la suya). Empezar por “de todas formas…, sin embargo…, no obstante…” ayudará a introducir nuestra opinión sobre el tema.
No temas por estar en desacuerdo, lo contrario aporta valor a las organizaciones y lo que tu ves como un conflicto puede servir para mejorar vuestra relación y vuestra forma de colaborar.
Pedir; también es inteligencia emocional
Terminaremos pidiéndole a la persona algo para mejorar la forma de abordar el mismo conflicto en un futuro. Nos ayudarán a introducirlo frases como “te pido que la próxima vez…”, “cuando vuelva a suceder me gustaría que…”, “en una próxima ocasión por favor asegúrate de…”
¿Y SI LA PERSONA NO ME ESCUCHA?
La persona estará cargada de rabia e intentará interrumpir los 3 pasos anteriormente comentados. Quizá será necesario repetir el circuito anterior hasta 3 veces (siento tu situación…, de todas formas…, te pido que).
¿QUÉ HAGO SI ME SOBREPASA LA SITUACIÓN Y NO PUEDO LLEVAR A CABO LA TÉCNICA DE LOS 3 PASOS?
Si la situación nos sobrepasa y no nos sentimos capaces de afrontar la técnica de los 3 pasos, podemos pedir tiempo para espaciarlos. Frases cómo “ahora no puedo atenderte lo hablamos a las 15.00h?”, “necesito que hablemos de esto en la reunión de mañana” nos pueden ayudar a ganar tiempo para calmar nuestra emoción y poder afrontar la conversación desde la serenidad.
OTROS TIPS DE INTELIGENCIA EMOCIONAL PARA ABORDAR LA SITUACIÓN DE CONFLICTO
Que la otra persona no ponga en juego la inteligencia emocional y la comunicación asertiva no significa que tu debas ponerte a su nivel sino todo lo contrario. No podemos responder a la agresividad con mas agresividad, pues solamente empeoraremos la situación.
Muestra respeto hacia la otra persona en todo momento. Pero recuerda, la inteligencia emocional incluye poner límites ante una persona que no te está respetando. Si llegas a este punto, puedes decir algo así cómo “desde este lugar no seguiré conversando. Cuando quieras hablar desde el respeto, seguiremos esta conversación”.
Muestra interés para llegar a encontrar una solución que favorezca a ambas partes y define nuevas acciones y compromisos en los que te comprometes a hacer para mejorar la situación.
NO ME CREAS… PRUÉBALO
Te invito a probar de introducir estas nuevas acciones en tus relaciones personales y profesionales. Rápidamente observarás que tus pequeños cambios, aunque te parezcan invisibles, provocarán grandes cambios a tu alrededor. Recuerda que somos un sistema; yo cambio, todo cambia.
¡Pruébalo y cuéntame como te va!
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